"Tanto en la vida como en el deporte...

... los límites se los pone uno mismo" (Josef Ajram) 

En ocasiones no es necesario ganar una final para proclamarse campeón del mundo, porque Rafael Nadal es ese hombre que rompe todas las expectativas. No importa que se lesione y este retirado del terreno de juego meses, y sus rivales le adelanten en puntuación porque él tiene el poder de volver y recuperar el número uno del tenis mundial. Perdió el abierto de China ante su máximo rival, Djokovic, que sigue imbatido en 19 partidos y suma un cuarto título, pero dice adiós a sus 101 semanas en lo más alto concediendo al manacorí los honores.

Primera final y primer triunfo de esta temporada para el Real Madrid Basket, que revalida el título ya logrado el pasado año en Zaragoza; la Supercopa Endesa. Dos triunfos seguidos: liga y copa. Pablo Laso está a los mandos de este equipo que sabe a lo que juega adelantando con cuatro puntos a un Barcelona algo desequilibrado. Y como no, destacar al jugador más valioso del torneo, el Chacho Rodríguez, que releva a su compañero Rudy Fernández que consiguió este MVP el año pasado. 

A diferencia de Nadal otros ganan una carrera y se proclaman, casi con toda seguridad campeones mundiales. Además merecidísimamente, porque Vettel lo vale y lo ha demostrado a lo largo de todo el campeonato y en todas las partes del mundo, de norte a sur y de este a oeste. Y por fin este fin de semana está a solo un paso de conseguirlo y marcar una era, un antes y un después en la historia de la Fórmula uno. Y está claro que solo no lo podría haber  conseguido y tiene que dar gracias a su gran monoplaza; su Red Bull RB9, porque cuando se sube en el ambos se convierten en uno, solamente uno para dominarlos a todos y conseguir su octava victoria de la temporada en Yeongam, su cuarta consecutiva y a tan solo 23 puntos de su cuarto título mundial, por que Vettel tiene madera de triunfador.

Tras haber ganado la Selección Española de Hockey patines el mundial con la victoria en la final ante Argentina, los jugadores del Barcelona también tiene ansia de títulos. Motivo de ello fue el triunfo de este fin de semana ante el Reus Deportiu, en una tanda de penaltis donde un solo gol fue necesario para otorgar el título de campeón de la Supercopa al equipo azulgrana.